Hoy os traemos un post con el que inauguramos nuestra sección de viajes en familia. En este caso hemos elegido ir a Valencia para visitar el Oceanográfic de Valencia, que como nosotros vivimos en Barcelona, estamos relativamente cerca.
Llegamos a Valencia en unas tres horas y media y nos alojamos en un hotel en el centro, muy cerquita de la plaza del Ayuntamiento. Aprovechamos ese día para visitar el centro histórico, la catedral, el famoso Miguelete… y por supuesto para tomarnos una horchata en la famosa cafetería Santa Catalina
Al día siguiente nos levantamos y después de desayunar en el Lotelito recogimos nuestras cosas y nos fuimos a la Ciudad de las Artes y las Ciencias. Sólo nos daba tiempo en un día a visitar el Oceanografic, así que el resto nos quedará pendiente para la siguiente visita, pero tanto nosotros como mi hijo disfrutamos muchísimo del espléndido día que nos hizo. Sin embargo, aunque las instalaciones eran muy buenas y el recinto muy bien cuidado siempre me queda un sabor amargo al ver los animales en cautividad… al fin y al cabo se pasan toda su vida encerrados dando vueltas en los mismo metros cuadrados para nuestro disfrute. ¿Qué opináis vosotros? Deberíamos seguir yendo a este tipo de recintos? Bueno os dejo unas fotos de nuestra experiencia …